Guadalupe Castañeda Orozco, egresada de la licenciatura en Derecho de la generación 2017-2022, nos comparte un poco sobre su experiencia al haber estudiado en La Salle Pachuca, así como algunas reflexiones sobre su trayectoria académica y profesional.

Guadalupe recuerda su ingreso a la universidad con un toque de nerviosismo, pero a la vez con el entusiasmo de embarcarse en una nueva etapa de su vida, misma en la que pudo conocer a personas excepcionales.

“Conocí a personas maravillosas durante mi estancia en la universidad, no solo por mis compañeros de carrera, también de otras licenciaturas. Me sentí muy a gusto, muy acogida por el personal administrativo y docente. Fue una experiencia bastante buena”.

Durante su tercer semestre, Guadalupe, por medio del “Acompañamiento Procesal” comenzó a adentrarse en el campo laboral, el cual es un requisito durante la licenciatura.

“Hice mi acompañamiento en la Subsecretaría de Ingresos del Estado de Hidalgo desde tercero y hasta quinto semestre. Ahí se dio una oportunidad laboral y entré a trabajar de manera formal en la Subsecretaría; posteriormente, en séptimo semestre, comencé a trabajar en la Auditoría Superior del Estado de Hidalgo, en la dirección general de asuntos jurídicos. Yo les recomendaría a mis compañeros que estudien y trabajen al mismo tiempo, porque refuerzas lo que vas aprendiendo en tu carrera”.

Referente a su proceso de titulación, optó por la modalidad de examen general de conocimientos CENEVAL, mismo en el que obtuvo una calificación sobresaliente, siendo galardonada con el premio CENEVAL al desempeño de la excelencia –EGEL.

“El día que publicaron los resultados estaba muy nerviosa. No quería verlos, porque, si te soy sincera, sentí como que no había pasado el examen. Entonces, cuando los revisé, coincidió que venía a hacer algún trámite con el maestro Cesario y le pedí que abriera los resultados porque yo tenía muchos nervios. Nada más cuando vi que abrió el PDF y puso cara de sorprendido, dije: “¡Seguro no lo pasé!”, pero me abrazó y me felicitó por haber acreditado el examen de manera sobresaliente. Lo recuerdo y todavía siento esa adrenalina.”

Ella atribuye este resultado a la combinación de su formación en la Facultad de Derecho y a su experiencia laboral. Destaca la calidad de los catedráticos de la universidad, quienes no solo resolvían dudas académicas, sino también aquellas relacionadas con su trabajo.

“Me he dado cuenta de que lo que distingue a un lasallista son sus valores, la educación que nosotros tuvimos, no solo en el aspecto profesional, sino también en el lado humanista”.

Después de alcanzar este reconocimiento, Guadalupe iniciará nuevamente una etapa junto a la comunidad, pues está próxima a comenzar su maestría en Derecho Civil, misma que ha elegido ante la necesidad de asesoramiento legal en temas como pensiones alimenticias y contratos.

“Muchas personas se han acercado a mí para pedir asesorías, en especial mujeres en el tema de pensiones alimenticias, quienes frecuentemente se muestran inconformes de la atención de otros abogados, que suelen cobrar cantidades muy altas o bien no le dan la atención debida a su caso. Desde que entré a La Salle me propuso ayudar a toda persona que se cruzara en mi camino y creo que lo he cumplido. Me gustaría seguir apoyando a las personas que lo necesiten”.

¡Muchas felicidades Guadalupe! Historias como la tuya son el reflejo de la entrega hacia tu profesión, pero también del compromiso por ayudar.